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Esta plantita de otoño-invierno es originaría de Madagascar, familia de las crasuláceas es muy decorativa, sus carnosas hojas verdes con bordes ondulados y a veces con bordes teñidos de color rojo y sus vistosas y abundantes flores en colores: rosas, rojas, amarillas, blancas, naranjas y púrpuras, según las diferentes especies, la hacen imprescindibles entre las flores del otoño.
Este género de plantas comprenden unas 125 variedades, algunas son arbustivas otras herbáceas, algunas variedades las usan como planta medicinal en diferentes partes del mundo, Asia, América latina o África, hay mucho por aprender de esta bonita planta.
Son plantas más bien de interior ya que no toleran el exceso de agua y se pudren con facilidad, por tanto hay que tener cuidado con el riego.
Se propaga bien por esquejes, cortando un tallo de 10 centímetros, se deja secar un par de días y se planta en una maceta con tierra especial de cactus y se mantiene a una temperatura alta ( 21º).